La consejera de Acción Social y Ciudadanía del Gobierno catalán, Carme Capdevila, ha presidido en Tánger (Marruecos) el acto de graduación de los primeros 56 alumnos del Programa Catalunya-Magrib. Una iniciativa de la Generalitat de Cataluña que cuenta con el apoyo del Gobierno marroquí y de la Unión Europea. El objetivo principal es prevenir la emigración precoz, en situación irregular y sin referentes familiares de menores de origen marroquí hacia Europa y, más concretamente, hacia Cataluña.

Los jóvenes que han recogido hoy su diploma forman parte de la primera promoción del Liceo Catalunya-Marroc, que acoge la sede del Programa en Tánger y es el espacio donde se realizan las clases de formación teórica durante los primeros tres meses. El resto de la formación, hasta completar un año, se concentra en prácticas laborales en empresas que necesitan mano de obra cualificada. En esta primera graduación 21 alumnos se han especializado en construcción y 22 más en hostelería. El resto, 13 en total, han cursado estudios primarios para reincorporarse al sistema educativo oficial, después de haberlo abandonado de forma prematura, o bien para cursar a posteriori la formación profesional que facilita el Liceo, con una clara vocación de inserción laboral.La oferta formativa incluye desde clases de francés, árabe y matemáticas hasta sistemas de organización profesional, medidas de higiene, salud y prevención de riesgos o técnicas para encontrar trabajo. Actualmente, hay una segunda promoción de alumnos que acaban de empezar las prácticas y una tercera que ha iniciado la formación teórica. En total y desde principios de 2008 ya han pasado por el centro más de 130 chicos y chicas que se han podido especializar en construcción, hostelería o confección. Tres ámbitos económicos importantes y al alza en la zona, donde es perceptible un auge del sector inmobiliario con numerosas promociones de viviendas. Actualmente, en Marruecos la oferta de restaurantes y hoteles se consolida sobre todo en verano como un punto turístico y de paso para muchas personas que vuelven de vacaciones a su país de origen. El auge turístico coincide con un momento en que se instalan cada vez más empresas deslocalizadas, especialmente del sector textil.Respuestas ante las dificultadesUna de las principales fortalezas del Programa Catalunya-Magrib es el acompañamiento individualizado que el equipo de profesores y tutores hacen de cada alumno. Se lo recupera después de haber abandonado de forma prematura la etapa escolar y se hace un seguimiento de su evolución para que acabe volviendo a la escuela o bien consiguiendo un puesto de trabajo digno. Eso sucede en un entorno social poco favorable: se trata de menores que viven en los barrios de la periferia, donde el nivel de vida es muy bajo, las viviendas sin servicios básicos conviven con chavolas y las perspectivas de futuro son escasas. A menudo son hijos de familias numerosas (con 10 o 15 hermanos) o desestructuradas, un panorama que los hace candidatos a la emigración irregular.Precisamente, para luchar contra esta realidad el Programa centra los esfuerzos en la mediación y la sensibilización tanto del menor como de la familia y de su entorno más próximo. Se combate la falsa imagen preconcebida de éxito si se emigra a Europa y se recuerda que el derecho a la educación y los derechos de los niños son derechos humanos básicos que se tienen que respetar. Para conseguir penetrar en este tejido social se trabaja a través de una veintena de asociaciones de barrio, auténticas conocedoras de la realidad que las rodea y encargadas de detectar los casos de riesgo a través de entrevistas con los padres y madres de los menores.La sensibilización también se hace muy necesaria con los propios jóvenes, ya que sufren una doble o triple presión: la de su núcleo familiar, que a menudo lo empuja a emigrar para buscar un futuro mejor al otro lado del Estrecho; la de su entorno social y de amistades más próximo, que percibe hacer el salto como un éxito y un objetivo permanente, y la de los mismos compañeros en los centros de menores de Cataluña, que juzgan como fracaso cualquier intento de volver voluntariamente a Marruecos. Ante eso, es muy importante la tarea de los tutores que acompañan a los jóvenes que han vuelto a Tánger y que se acogen en los recursos residenciales del Programa. Se lleva a cabo un acompañamiento para su inserción sociolaboral hasta conseguir una autonomía y una independencia con la mayoría de edad.Por lo que respeta a los retornos voluntarios efectuados a través de la Secretaría de Infancia y Adolescencia y enmarcados en el Programa se tienen que contabilizar hasta 11 casos desde la puesta en funcionamiento del Catalunya-Magrib (antes Barcelona-Tánger) en 2007, de los cuales tres corresponden a mayores de edad. Se trata de los primeros 11 casos de retorno voluntario que ha habido en Europa.Un vértice de la Secretaría de Infancia y Adolescencia, en MarruecosLa existencia del Programa en Tánger ha permitido al mismo tiempo la implantación de un Equipo de Atención al Menor (EAM) de la Secretaría de Infancia y Adolescencia en origen, un hecho que facilita mucho el trabajo relacionado con los menores de origen marroquí que viven en los centros de protección a la infancia y a la adolescencia de Cataluña. Gracias a este equipo de profesionales en Marruecos se puede contactar y trabajar directamente con las familias de los jóvenes, haciendo más fácil la intervención global e interactuar con todas las partes implicadas (padres e hijos) a la hora de proponer y gestionar los posibles retornos voluntarios. Un retorno que -se insiste- irá vinculado a una inserción sociolaboral en el Marruecos de la mano del acompañamiento y la formación del Programa.Asimismo, el EAM se encarga de contactar con familias de origen marroquí que residen en Cataluña y que pueden tener vínculos parentescos con los menores en centros de la Dirección General de Atención a la Infancia y la Adolescencia con el fin de sondear la posibilidad que se conviertan en familias acogedoras. Se considera que los jóvenes siempre estarán más acompañados y con mejores condiciones si viven con algún tío o hermano que si se mantienen en los centros de menores, que por desconocimiento las familias marroquíes acostumbran a considerar como meros espacios educativos o de formación.(marruecosdigital.net)

El programa Cataluña/Magreb ayuda a la integración de menores

La consejera de Acción Social y Ciudadanía del Gobierno catalán, Carme Capdevila, ha presidido en Tánger (Marruecos) el acto de graduación...
El síndic de Greuges ha abierto una queja de oficio para conocer el tratamiento que reciben los menores extranjeros no acompañados, cuyo número de atendidos en el primer trimestre de este año por parte de la Generalitat ascendió a 262.
Además, su titular, José Cholbi, ha pedido información relativa a las medidas adoptadas para la implantación de los procedimientos establecidos en la nueva normativa estatal de la Comunidad Valenciana.
En un comunicado de prensa, el síndic resalta que la entrada en la Comunitat de menores extranjeros no acompañados ha supuesto en los últimos años la necesidad de efectuar cambios en los sistemas de protección de menores y aumentar los recursos y el número de plazas para su atención.
Asimismo, se han tenido que adecuar los procedimientos y protocolos que permitan atender las necesidades específicas de los mismos.
Según la Generalitat, en el primer trimestre de 2011 se atendieron a 262 menores extranjeros no acompañados, denominación dada a los extranjeros menores de 18 años que llegan al territorio español sin la compañía de un adulto responsable de él.
La entrada en la Comunidad Valenciana de menores extranjeros no acompañados ha supuesto, en los últimos años, la necesidad de efectuar cambios en los sistemas de protección de menores, aumentando los recursos y el número de plazas para su atención , así como adecuando los procedimientos y protocolos que permiten atender las necesidades específicas de los mismos.
Asimismo, se han producido modificaciones en la normativa estatal que regula la atención a los menores no acompañados en España.
Así, el pasado 30 de mayo de 2011 entró en vigor el Real Decreto 557/2011 que supone un avance en lo relativo a asegurar los derechos reconocidos a los menores extranjeros no acompañados mientras permanecen en el país y en los procedimientos de repatriación a los que pudieran verse sometidos.
Cholbi se ha dirigido a la Conselleria de Justicia y Bienestar Social para solicitar información sobre la evolución del número de menores extranjeros no acompañados atendidos por el sistema de protección a la infancia, las medidas adoptadas con estos menores, y los centros, programas y servicios que dispone la Conselleria para atender a estos menores.
También ha pedido información referente a los expedientes de repatriación y autorizaciones de residencias promovidos por la Conselleria, y el resultado de los mismos.(lasprovincias.es)

El Síndic analiza la atención que reciben los menores extranjeros no acompañados

El síndic de Greuges ha abierto una queja de oficio para conocer el tratamiento que reciben los menores extranjeros no acompañados, cuyo ...
Forse qualcuno ricorda una film di John Woo, Face off, in cui il protagonista viene confinato in una prigione di massima sicurezza in mezzo al mare. Questa pratica aberrante è oggi la nuova frontiera praticata dal ministro Maroni nel perseguire la politica legista del fora dai ball. Infatti, da diversi giorni, dopo le fughe in massa dai Centri di Lampedusa e la frettolosa rimozione degli immigrati dall'isola, ci sono almeno tre navi, la Moby Fantasy, la Moby Vincent e l'Audacia che stazionano al largo di Palermo con a bordo un numero imprecisato di persone, alcuni minori e donne in cinta. Il manifesto sta seguendo la vicenda che è stata denunciata anche da diverse associazioni di giuristi.
Il punto è che queste navi sono diventate di fatto dei Centri di detenzione galleggianti, al di fuori di ogni regola, anche quelle previste dalla seppur restrittive norme nazionali sui diritti degli immigrati. Particolarmente grave la presenza di minori, poiché dovrebbero avere un trattamento consono ai loro diritti. Anche a fronte di una richiesta formale in questo senso, volta a conoscere la situazione degli imbarcati minorenni, avanzata dalla legale della nostra organizzazione alle autorità competenti, non abbiamo ottenuto alcuna risposta. Solo la visita di una parlamentare, l'onorevole Alessandra Siragusa del Pd, ho potuto constatare la loro effettiva presenza, senza peraltro che nulla cambiasse. A rimarcare ulteriormente la gravità di questo silenzio, c'è il fatto che alcuni dei minori erano già stati presi in carico da noi per l'assistenza legale, di fatto ad oggi impedita da questa opacità informativa. E dunque la lista delle violazione dei diritti che questa pratica implica è molto lunga: parte da quelli costituzionali, passa per quelli del diritto all'informazione e arriva alla totale violazione della Convenzione Onu sui Diritti dei Bambini.
Ovviamente, se nessuno, tranne i parlamentare e non certo le Organizzazioni umanitarie preposte all'assistenza, e non la stampa, una nave sempre alla rada è un luogo off limits, un lager galleggiante. La pratica del lager galleggianti entra dunque in funzione in un momento di estrema degenerazione politica, che ha permesso alla vice sindaco di Lampedusa, la leghista Angela Maraventano, ai microfoni di Radio Padania la settimana scorsa, di sostenete impunemente che le Organizzazioni umanitarie «informano esageratamente» dei loro diritti gli immigrati, spingendoli così alla rivolta: «Chiederò al Governo il loro allontanamento dall'isola, poiché sono le associazioni umanitarie che, venendo a vedere come li trattiamo e come non li trattiamo, fomentano questi delinquenti e ne sostengono le battaglie». Opinione condivisa da Bernardino De Rubeis, sindaco di Lampedusa, il quale, anch'egli su Radio Padania ha dichiarato: «Ho piena fiducia in Roberto Maroni perché è un ministro che ha avuto la forza di sterminare tutte le mafie presenti in Italia». Il Sindaco se la prende in particolare con le organizzazioni non governative che vigilano sulla condizione dei minori stranieri non accompagnati: «Minori che in realtà non sono minori, poiché hanno 16 o 17 anni e sono ben dotati, pertanto dobbiamo stare attenti altrimenti ce li ritroviamo nelle camere da letto».
A parte il tono delle dichiarazioni, si evince da esse l'ignoranza crassa delle Convenzioni internazionali, e un razzismo palese che rappresenta la cifra essenziale di tutte queste politiche. E dunque, di conseguenza, viene negata l'agibilità alle associazioni umanitarie dentro i Centri: la nostra Organizzazione ha chiesto ormai da tre settimane di tornare a lavorare a Lampedusa ma ancora non abbiamo risposta, pur avendo finanziamenti privati e minori in carico. D'altra parte i migranti vengono ghettizzati sulle navi, introducendo pratiche di detenzione amministrativa nel più puro stile israeliano. Per questo chiediamo, e vorremmo che la politica di opposizione ci sostenesse in questo, di poter vedere accolta la nostra richiesta di agibilità presso i Centri di Lampedusa, nei quali oggi ci sono diverse decine di minori che hanno diritto all'assistenza legale, informazioni chiare e trasparenti circa l'identità delle persone imbarcate sulle tre navi, così come chiediamo di conoscere la destinazione delle navi e dei migranti trattenuti e di sapere se è stato notificato loro qualche tipo di provvedimento di trattenimento o respingimento e se vi è stata tempestiva convalida giudiziaria. Sono richieste basilari, che pertengono ad uno stato di diritto; se non dovessero esser evase il vulnus che aprirebbero potrebbe far passare violazioni ancora peggiori.
* Presidente di Terre des Hommes

LE NAVI LAGER E I DIRITTI NEGATI DEI MINORI

Forse qualcuno ricorda una film di John Woo, Face off, in cui il protagonista viene confinato in una prigione di massima sicurezza in mezzo...
Des dizaines d'adolescents, venus seuls du monde entier, dorment dehors en Seine-Saint-Denis, un mois après la décision du conseil général de ne plus accueillir de nouveaux mineurs isolés étrangers, faute de moyens et au motif qu'il s'agit d'un «problème national».
Jeudi matin, une petite dizaine de jeunes sont allongés dans le hall du tribunal pour enfants de Bobigny, après avoir dormi dans un espace vert, tout près de là. «Cela fait 15 jours que je dors dehors et la journée, je viens parfois ici», confie un Indien, arrivé récemment en France, qui dit avoir 17 ans et préfère ne pas donner son nom.
Un autre, 16 ans, décrit un périple entamé au Pakistan, en passant par l'Iran, la Turquie, la Grèce, etc. Une fois à Paris, «je ne savais pas où aller et deux Pakistanais m'ont conseillé de venir ici», raconte-t-il. «Au Pakistan, il y a les combats, la vie est finie pour moi là-bas. En France, je peux tout recommencer», dit le jeune homme, fatigué.
Des salariés du tribunal leur apportent un petit-déjeuner, payé grâce à une collecte dans les bureaux.
Depuis le 1er septembre, environ 80 mineurs isolés étrangers (MIE) sont arrivés en Seine-Saint-Denis, rapporte le président du tribunal pour enfants, Jean-Pierre Rosenzweig. «Une vingtaine a pu être hébergée, mais plusieurs dizaines se sont retrouvées à la rue», déplore-t-il.
C'est «la débrouille» pour essayer de leur trouver un toit. La Croix-Rouge notamment en a accueilli certains. Mais M. Rosenzweig a aussi conseillé à de jeunes Maliens d'aller à Montreuil, où vit une forte communauté malienne, dans l'espoir qu'un compatriote les héberge. Il a lancé un appel aux habitants de Seine-Saint-Denis pour accueillir ces jeunes.
Et pourtant la France a signé des conventions internationales selon lesquelles elle doit accueillir et protéger ces mineurs.
Mais cette responsabilité retombe sur les départements. Or, depuis le 1er septembre, le président PS du conseil général de Seine-Saint-Denis, Claude Bartolone, ne veut plus accueillir de nouveaux MIE. Il estime qu'il s'agit d'un «problème national» et «non d'une affaire locale», et qu'il «n'est plus en situation de les accueillir dignement».
La Seine-Saint-Denis est l'un des points d'entrée sur le territoire national via l'aéroport de Roissy. Elle a accueilli 943 MIE en 2010, sur un total d'environ 6.000 arrivés en France. Leur prise en charge a coûté 35 millions d'euros à ce département pauvre.
Le 22 septembre, la préfecture de Seine-Saint-Denis a annoncé que «le ministère de la Justice allait oeuvrer à une répartition plus équitable et homogène de l'accueil des mineurs étrangers».
Depuis, la situation ne s'est pas arrangée. Le département et l'Etat se renvoient la balle, selon plusieurs sources.
Il y a eu mardi une réunion en préfecture, a indiqué Claude Bartolone. «Ils m'ont fait des propositions, on veut du concret», a-t-il ajouté. Il attend que soit «écrit» et «officialisé» le cadre juridique des propositions.
Claude Bartolone demande aussi une réunion avec l'association des départements de France et le garde des Sceaux.
Dès qu'une issue à la crise sera trouvée, il promet de «rouvrir la plateforme d'accueil» des MIE. Cependant, il refuse d'en accueillir de nouveaux cette année, car déjà plusieurs centaines de jeunes ont été hébergés depuis début 2011.(liberation.fr)

Seine-Saint-Denis: mineurs, étrangers, seuls et à la rue, en attendant une solution politique

Des dizaines d'adolescents, venus seuls du monde entier, dorment dehors en Seine-Saint-Denis, un mois après la décision du conseil gé...
HE started by hiding under a blanket in a lorry and hopes one day to wield a dentist’s drill. It’s not the screenplay of Marathon Man, but the adventurous life of Mustafa, an Afghan who has become a Dubliner.
The 22-year-old came to Ireland as an unaccompanied minor seeking asylum when he was 15, having left Afghanistan in a hurry, along with his family.

Somewhere along the way — he thinks it was either in Iran or Turkey — his family went in one direction, and he kept going in the other. Travelling in a succession of lorries over three months or more, he arrived at an unknown destination: Dublin.

"The whole situation was very different," Mustafa says in an accent more Artane — where he lived for a number of years — than Afghan.

The number of unaccompanied minors seeking asylum peaked in 2001 at more than 1,000, but while the numbers have declined in recent years, that is not to say that those children are not still in the asylum system.

Mustafa, for one, has gone from arriving in Ireland without a word of English, to spending 18 months in a hostel for unaccompanied minors, to a foster care placement in Artane, which completely turned his life around.

He describes the months after his arrival in Ireland as "a traumatic time", trying to learn English while undergoing interviews, with no documentation and an assessment process which included repeat blood tests and skins samples. It manifested itself in lashing out at those around him.

"I was in a bit of violence. When you are unhappy, when you are frustrated, you take it out with fighting and breaking stuff."

This ultimately resulted in him taking part in a hunger strike by 41 Afghan asylum seekers at St Patrick’s Cathedral in Dublin, something he sees as a youthful indiscretion, carried out by a less mature version of himself.

After the hostel setting, he moved in with his foster family and their children. It resulted in a dramatic change of fortune.

"It worked after two or three months because I barely talked to them," he says. "It’s natural. You need to settle down until you get to know people."

It has worked well. His new parents helped him integrate into the family and a local school, where the HSE had been happy for him to continue going to school in south Dublin when he had moved north.

"You feel welcomed. You can see hope and you can see another way," he says. when he was doing his Leaving Certificate at age 19, the HSE told him he had to move out and into direct provision. His foster mother calmly intervened so that at the very least Mustafa was able to finish his exams before moving to the centre on Francis St in the inner city.

"I am not a normal kid so I will take responsibility for my own life," he says, outlining how his foster family have still played an active role in helping him undertake short education courses while he awaits the chance to enter university, something which cannot happen until his status has been regularised.

Despite being in Ireland for seven years and the fact that he has not been able to trace his family, he still faces the possibility of deportation over what he terms "copy and pasted" decisions made by the asylum authorities when he was younger.

"I cannot be a good citizen if I move back to Afghanistan, the way I am now," he says, referring to how living in Ireland has "modernised" him and his outlook on life.

"You have to be optimistic, and you have to be realistic."


Read more: http://www.irishexaminer.com/ireland/mustafa-came-as-a-teenager-but-still-faces-deportation-169015.html#ixzz1ZNBnGJMA

Mustafa came as a teenager, but still faces deportation

HE started by hiding under a blanket in a lorry and hopes one day to wield a dentist’s drill. It’s not the screenplay of Marathon Man, bu...
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...

 

Minori Stranieri Non Accompagnati © 2015 - Designed by Templateism.com, Plugins By MyBloggerLab.com